Al concluir la última sesión que presidirá en la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), la ministra Norma Piña aseguró que la historia juzgará a quienes juzgaron.
A su vez, expresó su reconocimiento y gratitud a cada uno de los ministros y ministras que integraron el pleno y el tribunal.
“La Suprema Corte ha recorrido un largo camino para construir su legitimidad. No me corresponde a mí valorar en qué medida ese objetivo se alcanzó.
“Serán nuestras sentencias las que darán cuenta de ello. Será la sociedad y la historia misma, las que juzgarán a quienes hemos juzgado”, expreso con solemnidad.
Al levantar la sesión, reconoció que culminaría un ciclo fundamental de la vida pública mexicana, de más de 30 años ya que el próximo 1 de septiembre tomarán protesta los nuevos integrantes de la Corte, elegidos mediante una elección.
“Esta historia se ha escrito con debates intensos, disensos fecundos y consensos que, lejos de aplacar a la diversidad, han fortalecido el núcleo de nuestra democracia”, dijo.
“Este instante, cargado de memoria y de futuro, es un recordatorio de que la justicia no es una obra concluida, sino una construcción viva que nos trasciende”, agregó.
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“Es el fin de una era en el Poder Judicial de nepotismo”: Sheinbaum
A su vez, destacó el papel de la Suprema Corte como el máximo tribunal constitucional, que ha buscado garantizar la progresividad de los derechos humanos.
Lo describió como “la piedra angular a la justicia constitucional, el máximo garante del ordenamiento jurídico nacional y un bastión en la defensa de la democracia y las libertades de todas las personas”.
Por otro lado, la presidenta de México, Claudia Sheinbaum, aseguró en su conferencia matutina que se daba fin a una era de nepotismo.
“Es el fin de una era en el Poder Judicial, de nepotismo, claro que con sus excepciones”, sostuvo.
A su vez, se mostró complacida por la entrada de la nueva Corte, resultado de la Reforma Judicial impulsada por la 4T.